Mejorar la calidad del calostro en el ganado de carne
¿Por qué es importante el calostro para los terneros de carne?
El calostro –la primera leche que produce la vaca– es clave para la salud del ternero recién nacido y tiene un impacto importante en el desempeño futuro del animal. Los terneros nacen sin protección contra las enfermedades, ya que los anticuerpos (las inmunoglobulinas) no se transfieren de la placenta de la madre al sistema circulatorio fetal. Estas inmunoglobulinas esenciales –que contiene el calostro– desarrollan la inmunidad pasiva, la cual proporciona una protección inicial frente a los patógenos ambientales y a las enfermedades. Además, el calostro también es rico en proteínas, grasas y vitaminas esenciales; por lo que ayuda a los animales a empezar a desarrollar un sistema inmune saludable.
Beneficios de suministrar un calostro de buena calidad a los terneros de carne:
- Aumento de la productividad al destete.
- Mejor desempeño animal de por vida.
- Disminución de enfermedades y tratamientos.
Causas de un calostro de mala calidad
Ya que el calostro influye significativamente en la salud de los terneros de carne, hay que recordar que la calidad y la cantidad de este nutriente esencial depende totalmente de la madre y de las prácticas de manejo de la explotación. Así, la calidad y la cantidad de calostro pueden verse afectadas negativamente por:
- Edad de la vaca: Las vaquillonas de primer parto generalmente producen cantidades más pequeñas de calostro, el cual también suele ser de menor calidad en comparación con el calostro de las vacas más adultas.
- Alto estrés: Las vacas que experimentan estrés pueden tener pérdidas de calostro antes y/o durante el parto, lo que disminuye la cantidad de calostro.
- Un ambiente no adecuado para el parto: No contar con suficiente espacio o estar en un entorno aglomerado (con muchos animales u operarios entrando y saliendo) también puede contribuir con una mala calidad de calostro.
- Almacenamiento no correcto:El calostro excedente de una vaca debe almacenarse asegurándose de que sea enfriado o congelado inmediatamente después de ser recolectado; para que su buena calidad se conserve. El calostro refrigerado no debe ser almacenado por más de 2 o 3 días antes de ser suministrado; para así evitar una posible contaminación por bacterias perjudiciales.
- Nutrición inadecuada:Los niveles apropiados de proteína son fundamentales para una calidad y una cantidad óptimos de calostro. Y aditivos alimentarios como Bio-Mos®, Bioplex® y Sel-Plex® han demostrado –a través de numerosas investigaciones revisadas por pares– que optimizan la calidad y la cantidad de calostro.
- Falta de higiene:Si no existe un manejo adecuado del calostro, entonces uno limpio y de buena calidad puede contaminarse rápidamente con bacterias y patógenos. Por lo que se debe asegurar: a) que el calostro sea recolectado correctamente de una ubre limpia, b) sea almacenado en una cubeta o botella desinfectada, y c) sea suministrado a través de un biberón desinfectado o de una sonda esofágica.